[28-1-15] La presidenta de la Nación montó una escena por cadena nacional para difundir un nuevo relato y victimizarse frente a toda la sociedad, pretendiendo eludir su responsabilidad.

Cuando todos esperábamos escuchar con claridad el compromiso absoluto del Estado nacional con el esclarecimiento de unos de los peores crímenes que ha afectado a nuestra nación, la presidenta intentó mostrarse como victima del sistema cuya conducción exclusiva tanto jurídica como políticamente le corresponde a su familia desde hace más de una década. ¿Alguien puede creerle?

A la verdadera víctima solo se refirió para atacarlo jurídica y personalmente, el muerto no puede defenderse ¿es eso admisible?

Las largas referencias que en cadena nacional hizo a las acciones tomadas por el Estado nacional durante su mandato y el de su marido respecto de la causa AMIA solo demuestran una cosa: su total inutilidad para esclarecer la verdad.

El relato además, dejó en evidencia una incapacidad total para mantener el orden en un organismo que depende de ella en persona, la ex SIDE, actualmente secretaria de inteligencia, con grave afectación a los intereses de la Nación.

Su responsabilidad política por ese desorden y sus consecuencias, es absolutamente atribuible a ella y a sus estrechos colaboradores.

Lo que ocurrió no cambiara ni se esclarecerá con una cambio en la legislación, estamos frente a hechos consumados que son de su exclusiva responsabilidad política y por los cuales pretende no responder.

La modificación legislativa al sistema de seguridad interior pretende ser un golpe de efecto con una alta dosis de oportunismo del cual seguramente sacará provecho personal, como es su costumbre. Como siempre con los proyectos que impulsa, será a costa de un gran deterioro institucional que nuestro país, tardara años en superar.

Con esa finalidad aparece en escena nuevamente el Ministerio Público Fiscal, al que se refirió en su cadena nacional como órgano independiente. Ese organismo al que propuso al Famoso Dr. Reposo cuando se renunció a Righi con motivo de la investigación contra el vicepresidente en la causa Ciccone y luego a Gils Carbó a quien progresivamente se le han dado funciones o “se las ha tomado” para separar fiscales “enemigos” que investigan al Poder, nombrar Fiscales y Funcionarios “amigos que lo defienden incondicionalmente, y a la que ahora pretender hacer depositaria de importantes funciones de inteligencia nacional que seguramente ejercerá con el mismo criterio que ha usado hasta ahora: gerenciando impunidad.

La presidenta pretende correr el eje de discusión y hacernos creer que lo que ha ocurrido es un problema de índole legislativa que se resuelve con un nuevo régimen legal. Pretende hacernos creer desde una silla de ruedas que ella es una victima.

Lo único que dejó claro su mensaje y si los hechos ocurridos tuvieran que ver con el accionar de los servicios de inteligencia como se infiere de todo su discurso y de su iniciativa legislativa, es que la grave situación institucional que atraviesa nuestro país es de su innegable responsabilidad política.

Desde el Congreso de la Nación el radicalismo seguirá insistiendo por justicia para Nisman y para la Amia, es eso lo que nuestra democracia y nuestra república necesitan.

FUENTE:
SENADOUCR.GOV.AR