“Hombre, pueblo, Nación, Estado, todo: todo está en los humildes bancos de la escuela” Domingo Faustino Sarmiento

En un rato vuelvo con esta frase.

Esperé. Quería escuchar lo que otros decían. La oportunidad de la política. Y la necesidad de una mejor educación. Mal o bien se abrió un debate respecto a la educación argentina.

Las medidas del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires ya fueron informadas por todos los medios. Las evaluaciones tanto internacionales, como las de PISA y las del Operativo Nacional de Evaluación del Ministro Sileoni nos arrojaron malos resultados. Y es un dato de la realidad.

Precisando, la eliminación de los plazos tradicionales, la posibilidad de que los chicos de la primaria se lleven previas para el otro año, los alumnos que no aprueben materias no estarán obligados a compensar a fin de año y la admisión de alumnos que vuelvan al sistema en el grado que corresponda a su edad biológica. No serán obligatorias las pruebas compensatorias a fin de año o en marzo.

Es claramente una política educativa pero en base a qué y para qué.

Si hay inseguridad y desempleo es porque la educación no fue un éxito en todos estos años. Esta demostrada que mayor inversión no garantiza mejor calidad educativa; al punto tal que invertimos más que Canada y Australia y a su vez que 2 de cada 3 alumnos de escuelas públicas no aprenden a leer. Que 7 de 10 repitentes tengan padres con baja educación.; que la mitad de los pibes que arrancan el primario no terminen la secundaria. Que en la mayoría de las provincias, y sobre todo en la Provincia de Buenos Aires no se cumplan los 180 días. Son síntomas de que el futuro de nuestro país está en juego. Me pregunto, será quelos maleducados o malos aprendices son los que nos gobiernan que no saben percibir la realidad? Para mi Sarmiento los mandaría a diciembre. Y la materia sería Sentido Común.

Y otro dato no menor. Estas medidas desnaturalizan la función del docente. Quien mejor que los maestros y maestras saben percibir la evolución y desempeño de un alumno. Son necesarias mayores herramientas a los docentes y a los institutos de formación docente. Y mayores herramientas significan dotarlos de mayor libertad de decisión sobre el aula. No está bien que el docente tenga que recorrer toda la ciudad de punta a punta durante un día. O que luego de un año de intenso trabajo llegue a fin de año y le digan qué hacer desde el Ministerio. “Es política del Ministerio de Educación” se escucha en las salas de profesores.

Obviamente es la posmodernidad la que genera que la cultura del trabajo, el esfuerzo y el merito caiga relativizada y devaluada por las políticas actuales que buscan en flexibilizar la educación, una ocultación de la realidad.

La realidad que vemos en nuestros hijos o hermanos menores y no solo la de las estadísticas. La que vemos en la lucha de los docentes y maestros, no la que vemos en la tele, sino la de nuestras amigas y amigos maestros. En nuestra vida. Les doy mi ejemplo:

Tengo una hermana de 11 años, una novia que es docente en un nocturno que da clases todos los días hasta las 12 de la noche, milite en la universidad, recibí miles de ingresantes, donde muchos, no sabían separar de un texto una idea principal y otra idea accesoria. Provengo de una familia muy humilde donde mis padres siempre me dijeron que lo único que me va iba a dejar la vida es la Educación. Calculo que a muchos de ustedes sus padres le expresaron lo mismo.

Los argentinos, sin necesidad de lo que nos digan los que gobiernan o los especialistas si podemos percibir, saber, cómo está la Educación en Argentina. Porque la necesidad de la educación pública como pilar para nuestro País está en nuestro ADN como Argentinos. Nos importa y mucho. O Por lo menos nos importaba..

Ayer fue el día del Maestro, el día de Sarmiento, el de la ley de guardapolvos blancos, la 1420. En aquella oportunidad existió un hito en la historia argentina que fue el Congreso Pedagógico más revolucionario de la época. Pensamos en una determinada educación en como los Argentinos y Argentinas queríamos ser mejores. Mejores personas, vecinos, ciudadanos para aportar nuestro grano de arena al progreso de nuestro País.

Me refiero a la Historia porque creo que le da contenido a la política. No me conforman las expresiones vacías tomando por ingenua a la sociedad. Y más me indignan cuando preceden a campañas electorales.

Quiero corregir a parte de la oposición también, estas medidas no son para igualar para abajo. Directamente no iguala, genera desigualdad, la recicla. Profundiza lo que ya viene mal. La educación no es solo un medio o herramienta, es un fin en sí mismo, transmite el valor del esfuerzo propio, de la autodeterminación de ser mejores, en sí de la libertad.

Nuestro País, la República Argentina fue concebida para que tengamos una educación pública gratuita, gradual, laica y de calidad. Y debemos seguir así. Y exigir que el “Hombre, pueblo, Nación, Estado, todo: todo está en los humildes bancos de la escuela”. Porque olvidarnos de lo que la Educación implica, es condenar nuestro futuro.

FUENTE:
JR.ORG.AR