Aquí sus palabras:
Escribo esta carta a toda la sociedad, para manifestar mi disconformidad con el accionar de la fuerza policial de Viale.
Considero que los hechos ocurridos el día 25 de diciembre de 2013, ya son de conocimiento público; pero para los que todavía no lo saben, aquí está la síntesis de la historia.
Un joven (mi hijo) fue arrestado e incomunicado en momentos que era atacado él y su vehículo particular, por un grupo juvenil de vándalos.
Fue tomado cobardemente por la espalda por un agente de la fuerza policial local. Mientras continuaba la golpiza, fue esposado e incomunicado. Cabe destacar que “los agresores” en ningún momento fueron arrestados, ni identificados por la policía de nuestra ciudad.
Evidentemente fue más fácil arrestar a la víctima que estaba solo, defendiéndose y cuidando de su propia vida.
Mis incógnitas. ¿No conocían al resto de los jóvenes que estaban en el disturbio? ¿Qué pasaba? ¿Tenían miedo, a qué, o a quién/es?
Cuando los amigos de mi hijo me comunicaron del hecho, concurrí inmediatamente a la comisaría local, esperando información y contención para un momento difícil. Grande fue la sorpresa, porque lo único que escuché de los agentes en la oficina pública de la comisaria, fueron acusaciones despectivas hacia el detenido y que había sido trasladado. Sin más palabras.
Luego, me informó el encargado del operativo, que mi hijo estaba acusado de riña en vía pública y otros cargos. Debe saber este señor, que el ser humano es como una bestia, pelea hasta la muerte cuando su vida está en peligro, y eso fue lo que ocurrió.
En la comisaria no se le permitió comunicarse con ningún familiar, justificando su mayoría de edad.
He aquí otras preguntas: ¿quién debería comunicar a los familiares directos de la detención de una persona antes de ser trasladado a Paraná?. ¿Qué profesional de la salud examinó a mi hijo en la comisaría? ¿Estaban dadas todas las condiciones para ser trasladado?. ¿Tenía lesiones?.
Si un detenido cualquiera, durante el traslado sufre una crisis emocional severa, los agentes de la fuerza policial están preparados para calmarlo y contenerlo emocionalmente? Hoy, tengo la plena seguridad de que no y es muy alarmante.
Como padre, muy preocupado y dolido por la situación que estaba pasando mi hijo, solo esperaba que me trataran amablemente. Quizá, pienso, deberían haberme dicho: “mire señor: su hijo está detenido e incomunicado, quédese tranquilo que el muchacho está bien de salud, fue trasladado a Paraná, a tal dirección o dependencia y le recomendamos se asesore con un abogado…”. Pero evidentemente la falta de humanismo y profesionalismo es muy grande en la fuerza policial de Viale.
Por último quiero hacer un pedido a mí querida sociedad: a todos jóvenes que puedan acercar pruebas sin compromiso, las aceptamos. Es una manera de colaborar con la seguridad y con la justicia, que es de todos. Considero que juntos, con conciencia y paz podemos construir una sociedad más justa y valedera. Siento que se cometió un acto injusto. Se detiene solo a la víctima y los vándalos siguen gozando de libertad e impunidad.
Quiero también, agradecer a todos los vecinos de Viale que se solidarizaron en esos momentos de mucha tensión y angustia. Un agradecimiento especial para los abogados: Germán Manucci y Leonardo Dato, no solo por su profesionalismo sino también por la calidez humana y la contención hacia mi hijo y a mi familia.
CARLOS WEISS
Pte. Comité Departamental
